- Nombre: Kuchu Buranko
- Tipo: Serie
- Género: Progresivo, Psicológico, Comedia
- Estudio: Toei Animation
- Año: 2009
- Capítulos: 11
Sinopsis:
Ichiru Irabu es la persona más egocéntrica del hospital donde trabaja, es señalado tanto por sus pacientes como por sus colegas como una persona extraña, ya que es mimado por su madre y le gustan cosas tan absurdas como las inyecciones, una total mofa a su profesión de psicólogo. Sumados a su fetiche por las inyecciones y su complejo de Edipo están su Porsche verde y una mezcla de 2D e imágenes reales. A pesar de ello cuenta con una agenda de pacientes únicos, los que para bien o para mal tendrán que atenerse a la lógica de su doctor.
Reseña Crítica:
Kuchu Buranko en mi opinión es uno de los experimentos de Anime mejor trabajados, es una obra totalmente diferente a lo que nos tienen acostumbrados la Toei Animation, y en mi opinión, es uno de sus más grandes aciertos de los últimos años, un Anime al más puro estilo experimental.
Es una obra que te envuelve con sus escenas psicodélicas, bizarras y un tanto surrealistas, es una obra que te lleva por un recorrido de los problemas y trastornos que aquejan a muchos habitantes de esta sociedad moderna, y resulta agradable ver un anime de carácter experimental que rompe con la narrativa clásica y nos hace sentir emociones, experiencias, sentimientos, con un valor muy estético y muy artístico.
Sin importar que la serie en general sea totalmente experimental, la historia está muy bien centrada en la realidad y claramente es un reflejo de la sociedad actual, sin dudarlo puedo decir que es un golpe directo a esa sociedad actual que muchas veces termina por agobiar a muchos de sus habitantes. En la corta duración de la serie, esta se las arregla muy bien para explotar al máximo la gran personalidad no solo de su protagonista un psiquiatra excéntrico, polifacético y adicto a las inyecciones de vitaminas, sino que tambien se las arregla para profundizar muy bien en las múltiples y diversas personalidades de todos los pacientes.
Con el pasar de los episodios vemos como todos los pacientes que se muestran, han sucumbido ante el estrés y la agobiante presión de una sociedad que no perdona, todo esto reflejado en los diferentes traumas, miedos y trastornos de los diferentes pacientes a lo largo de la serie. Pero el mayor acierto de toda la serie es el brillante seguimiento que se le da a los distintos trastornos por medio de sencillas explicaciones sobre las causas y síntomas del trastornos en cuestión, menciono esto porque la serie habla de cosas psiquiátricas como son los TOC (Trastorno obsesivo compulsivo) y me resulta interesante que durante los episodios vayan dando algunas explicaciones fáciles de entender sobre las causas, síntomas y demás de los diferentes trastornos presentados en cada episodio.
Lo que la hace tan especial esta serie, es sin duda la hermosa pero extraña animación. La desbordante mezcla de inquietantes colores, combinada con las cambiantes imágenes entre lo real y lo animado, crea un ambiente psicodélico y bizarro, que termina en un ambiente surrealista acentuado las paranoias de todos los personajes, quienes por momentos sufren de extrañas analogías con algún animal determinado. Los personajes secundarios son simples figuras de cartón al fondo de cada escena, demostrando lo irrelevantes que son y dando pie a solo centrarse en los protagonistas de cada historia.
La banda sonora es muy agradable, yo esperaba una música desquiciante que fuera a la par con la animación psicodélica, pero grande fue mi sorpresa cuando escucho esa música techno y un tanto dance que resulta tan energizarte y que realmente se ajusta a la atmósfera de la serie, reflejando en sí misma un tema importante del anime: la separación de la persona de su lugar en la sociedad.
Con humor por momentos muy negro y de cierta actitud estoica, la historia no deja de sorprendernos por su gran humanismo, Kuchu Buranko se adentra en los mundos de cada hombre, desde los más comunes a los poco comunes. Sus temas son suficientes para destruir su vida, pero como señala Irabu, algo raro se puede encontrar en ella. Nuestros defectos después de todo no son una especie de enfermedad, son parte de nosotros. A veces la cura no es deshacerse de la enfermedad, sino aprender a vivir con ella. Por todo esto la historia no deja a un lado el aspecto reflexivo de todo Anime psicológico, y esto se ve consumado en un solo mensaje. “Nadie es perfecto”
En conclusión Kuchu Buranko es una serie que no está hecha para los fanáticos ajenos al género ya que puede resultar desconcertante e incómoda, inclusive puede resultar un poco cargada y difícil de manejar para algunos fanáticos de lo experimental, pero una vez que te acostumbras es viento en popa. Es una serie que tras inundarnos con una explosión de colores vibrantes y escenas un tanto surrealista, nos da un tema de reflexión sobre el estado actual de nuestra sociedad y la forma en que afecta nuestra convivencia con nuestros semejantes. Como lo dije al principio este es uno de los experimentos de Anime mejor trabajados y que resulta agradable ver que algunos estudios comiencen a apostar por un medio de animación mas artístico y expresivo.
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